Ciberseguridad y protección de los datos
- 30 July, 2025

En los últimos años, muchas personas que antes quedaban fuera del sistema financiero empezaron a acceder a nuevas herramientas para comprar, pagar, ahorrar o vender.

Todo esto fue posible gracias a la tecnología aplicada a los medios de pago. Hoy existen soluciones simples, digitales y accesibles que permiten comprar sin depender de un banco tradicional o de una tarjeta de crédito.

En esta nota te contamos, en lenguaje claro, qué significa esto y cómo puede ayudarte tanto si querés organizar tu economía personal como si tenés un comercio y buscás vender más.

¿De qué se tratan los medios de pago digitales?

Es el uso de plataformas digitales para resolver cosas que antes solo podían hacerse en una sucursal bancaria: pagar, cobrar, financiar una compra, acceder a un préstamo, controlar tus ingresos o gastos, etc.

Gracias a estas soluciones, hoy muchas personas pueden:

  • Comprar en cuotas sin tarjeta de crédito
  • Pedir préstamos 100% online
  • Pagar desde el celular sin usar efectivo
  • Controlar sus gastos desde una app
  • Vender y cobrar sin tener un posnet

Y todo sin trámites largos, sin papeles y sin requisitos imposibles.

¿Por qué es importante?

Porque en Argentina, muchas personas no tienen acceso al sistema bancario formal, o simplemente prefieren evitarlo.

Al ofrecer nuevas formas de pagar, cobrar y administrar el dinero, estas herramientas ayudan a incluir a quienes antes no podían acceder al crédito o a una forma segura de gestionar su economía.

Esto se conoce como inclusión financiera: cuando más personas pueden participar del sistema económico con soluciones que se adaptan a su realidad.

¿Qué tipo de herramientas existen hoy?

Según lo que necesites, hay distintas opciones disponibles en el mercado. Algunas de las más comunes son:

  • Billeteras digitales: te permiten pagar, cobrar o enviar dinero desde el celular.
  • Préstamos online: pensados para personas o pequeños comercios, sin necesidad de presentar tanta documentación.
  • Planes de cuotas sin tarjeta: para acceder a productos sin pagar todo junto.
  • Apps de organización financiera: ideales para llevar un control de tus ingresos y egresos.
  • Cobros digitales: si tenés un negocio, podés vender sin terminal física, usando links o QR.
  • Ahorro y seguros simples: soluciones accesibles para proteger tu plata o planificar a futuro.

¿Y  todo esto es seguro?

Sí, siempre que uses servicios registrados, que cumplan con normas locales y cuiden tus datos.
Hoy, muchas de estas plataformas aplican los mismos estándares de seguridad que un banco tradicional. Además, cada vez hay más regulación y control desde organismos oficiales, lo que ayuda a cuidar a los usuarios. 

Conclusión: hay una forma más accesible de financiar tus compras

La tecnología está cambiando la forma en que nos relacionamos con el dinero. Ya no hace falta hacer filas en el banco ni tener tarjeta de crédito para acceder a cuotas, préstamos o medios de pago digitales.

Entender estas nuevas herramientas es clave para tomar mejores decisiones, tanto si sos consumidor como si tenés un comercio.

Cuanto más sepamos, más herramientas tendremos para vivir mejor.